“contra toda opinión, no son los pintores sino los espectadores los que hacen los cuadros “  Marcel Duchamp

Una obra no termina cuando el creador la concluye, cobra nueva vida cada vez que el espectador se adentra en sus detalles,  la contempla e interpreta  con renovada experiencia.

El papel del espectador es vital , se convierte en protagonista de la obra de arte. No es ya un sujeto pasivo, ignorante ansioso por que el autor le ilumine, sino que mirar y percibir (como demuestra también la física cuántica) son fenómenos totalmente activos. Mediante la mirada, el espectador tiene la misión de dar un sentido y por lo tanto completar la obra del autor dentro de su ambigüedad interpretativa.

A su vez, la obra que comparte nuestro  espacio  podría influir en algún momento de reflexión o simplemente ser  mudo testigo de nuestras vivencias. ¿Tu qué opinas?

Si tienes una obra en tu espacio, seria maravilloso si pudieras compartir una fotografía y si deseas también unas palabras que de lo ha sido esta compañía para ti. Contacto